Una carta a la sociedad española

Llevaba mucho tiempo sin publicar nada, pero he querido aprovechar el fin de año para escribir una carta a la sociedad española. Va dirigida en especial a los parados, a los que trabajan y sienten peligrar su puesto o ven empeorar sus condiciones, a los emprendedores y tienen ideas que quieren sacar adelante y a los que dirigen empresas que atraviesan dificultades.

A los parados y los que han recibido la noticia de su despido o del cierre inminente de su empresa o departamento, no tiréis la toalla. Espero que encontréis la forma de seguir motivados e ilusionados para encontrar o crear oportunidades que os permitan tener la vida que deseáis y que sabemos que merecéis. Lamentablemente la crisis y las situaciones de emergencia a veces sacan lo peor de nosotros, pero lo último que debemos hacer es cargar nuestra ira contra nuestros compañeros o contra otros sectores de la sociedad. Todos tenemos motivos para estar disgustados, pero tenemos más motivos si cabe para seguir adelante y para hacer cuanto esté en nuestra mano por superar las dificultades. No podemos quedarnos bloqueados. El bloqueo psicológico es la reacción más lógica y comprensible en esta clase de situaciones, pero también la más dañina en un momento como este. No podemos dejar de movernos, no podemos dejar de inventarnos alternativas, de mirar más allá. 

Cada cambio es una oportunidad para comenzar una nueva vida. Os pido que penséis qué es lo que sabéis hacer, qué es lo que se os da bien, a qué personas conocéis, a qué personas, empresas e instituciones podéis ayudar y en qué sectores podríais ser útiles. A veces se nos olvida todo lo que somos capaces de hacer después de trabajar en un puesto concreto mucho tiempo, o pensamos que sólo podemos encontrar un trabajo en el sector de la carrera que estudiamos. No es cierto. Sabes más de lo que a veces piensas, eres más útil de lo que a veces te hacen creer. No te pongas límites. Todos necesitamos un plan B y un plan C.

A veces todo empieza por tener unas tarjetas, por aprovechar que sabes algo o conoces a alguien. Empieza por crear una web gratuita, o por hacer un blog que sirve de plataforma para dar a conocer todas tus potencialidades. Quizá un vídeocurriculum, un reto público en redes sociales, una idea de negocio, networking en eventos o conferencias de temas que te interesan puede ser la clave para que puedas conseguir un trabajo o la solvencia económica que necesitas a través de iniciativas personales y compartidas. Y quizá, si tienes suerte, puedes acercarte más a tu sueño de hacer lo que te gusta de verdad para ganarte la vida. Somos conscientes de que cada caso es único, y de que hay situaciones especialmente complicadas. No decimos que sea fácil, decimos que es posible, y queremos animaros a que no desesperéis y sigáis luchando y buscando alternativas.     

A los que trabajan y ven cómo empeoran sus condiciones laborales, que trabajan más horas por menos y con menos personal, y a los que sienten que peligra su puesto de trabajo, tenéis que ser fuertes. A ninguno nos gusta esta situación, y la vivimos todos en todos los sectores. No estáis solos. Sabéis que no lo estáis, y todo lo que queda es valorar lo que aún tenemos y seguir trabajando y aportando valor a la sociedad en la medida de nuestras posibilidades. Debemos estar unidos y aguantar con valentía los momentos más difíciles sin dejar de pensar en alternativas personales que nos hagan sentir cierta seguridad e independencia ante cualquier eventualidad.   

A las empresas pequeñas, medianas y grandes, ánimo. Sois imprescindibles. Es un momento extraordinariamente difícil, en el que la constancia y la imaginación pueden ser la clave para superar los problemas que todos atravesamos. Quizá haya otros productos que vender aprovechando las cadenas de producción, otros servicios que ofrecer aprovechando el conocimiento del sector u otras posibilidades que no requieran demasiada inversión. Quizá pueda ser bueno un cambio de imagen o un mayor esfuerzo en comunicación, quizá sea una buena opción abrir nuevas líneas de negocio, o pensar en nuevas formas de atraer clientes, tanto en el mercado interior como el exterior. Sabemos que es extraordinariamente difícil, que es muy complicado modificar estructuras y reducir los gastos, que es muy difícil pararse a pensar y redefinir estrategias en un momento tan complicado, pero es lo que más necesitamos. Adaptarnos a las nuevas circunstancias, cambiar tanto como sea necesario, pensar en el mundo en que vivimos y no en el que vivíamos. Este año es un reto para todos, un desafío, una prueba de valor y de sacrificio. Pero no debemos olvidar que siempre hay una forma. Siempre la hay.

A los emprendedores, gracias. Gracias por vuestras ideas y vuestra fuerza. Gracias por dedicar vuestro tiempo y esfuerzo a algo tan apasionante como incierto, que abre nuevas posibilidades y brinda esperanza a nuestra sociedad. Es absolutamente necesario para España. Probablemente más de lo que vosotros pensáis. Más de lo que España sabe. No os confundáis, el éxito de un proyecto, de una idea, no pasa únicamente por conseguir una empresa rentable. Porque cada cosa que aprendéis durante el camino es un éxito indudable. Cada barrera que tumbáis, cada miedo que superáis, cada nuevo reto que aceptáis es un éxito para vosotros y para España. Es un éxito conseguir seguidores en las redes sociales, un éxito sacar adelante una web, es un éxito lograr la confianza de personas que apuesten por vuestro proyecto, aunque no aporten dinero. Un éxito reunirse con gente muy ocupada y poco dispuesta. Un éxito aprender contabilidad cuando no sabías nada, o tocar algunas cosas de HTML para mejorar tu blog en Wordpress. Es un éxito hacer un vídeo, conseguir la colaboración de la gente y conseguir que algunos clientes estén dispuestos a pagar por lo que tienes que ofrecerles en vez de dedicar sus recursos a empresas consolidadas. Sois capaces de lo imposible porque creéis en vosotros y en vuestras ideas. Os pido que no solo sigáis adelante. Os pido que no os olvidéis nunca de demostrarle a todas las personas con las que habléis que ellas también son capaces de lo imposible si creen en ellas y en sus ideas. En algunas ocasiones, es el camino más seguro, aunque pueda parecer lo contrario.

A los que piensan en sacar un proyecto adelante, pero no están seguros o no saben cómo hacerlo, por favor, hacedlo. Se puede hacer sin grandes inversiones, se puede hacer sin arriesgarte prácticamente nada, se puede hacer sin haberlo hecho nunca. Se puede. De verdad que sí. Y probablemente esa idea tuya sea una idea que merezca la pena. Puede que solo haya que desarrollarla, o quizá haga falta darle forma para garantizar sus posibilidades de éxito. Sigue pensando, piensa en cómo crees que se puede hacer, con quién crees que deberías hablar, por qué es útil y quién puede estar interesado. Piensa en cómo te gustaría que se llamara, qué colores utilizarías, qué servicios podrías ofrecer a partir de esa idea, y de todas las que ideas que vayas teniendo. No desperdicies ninguna idea, ni menosprecies ninguna idea, y no olvides nunca que si a ti te parece que puede funcionar, probablemente pueda hacerlo. Y de nuevo, necesitamos el dinero para sobrevivir, pero la mayor garantía de éxito es valorar todo lo que consigues en vez de pensar en los millones de euros que ganan grandes compañías y lo difícil que es conseguir clientes. Y el mayor éxito es el orgullo de haber hecho algo que merezca la pena. ¿Lo mejor? Si de verdad merece la pena, los resultados económicos no deberían tardar en llegar.

Y a todos. Podemos superar esto. Vamos a hacerlo. Estoy absolutamente convencido. No debemos dejar de valorar que, a pesar de todo, la mayoría de nosotros seguimos manteniendo unas condiciones de vida muy superiores a las de la mayoría de personas del mundo. Que España es un gran país con muchísimo que ofrecer. Que tenemos un talento humano preparadísimo y capacitadísimo, y un futuro increíblemente prometedor aunque los problemas urgentes nos impidan verlo con claridad. Es verdad que hay injusticias. Siempre las ha habido y siempre las habrá. Es verdad que estamos preocupados, seríamos unos insensatos si no lo estuviéramos. Pero también es verdad que hay mucho que podemos hacer para mejorar las cosas. Hagámoslo. Y hagámoslo juntos.