Coleccionemos problemas
He decidido que me gustan los problemas. Me gusta detectarlos, analizar su origen, estudiar sus consecuencias y encontrar modos de solucionarlos. La mayoría de los problemas y los errores son, o pueden ser, recurrentes, por lo que es bueno encontrarlos cuanto antes, eso te permitirá ir despejando el camino de problemas que podrías tener más adelante, o que podrías no dejar de tener nunca. Por eso me alegro cuando me encuentro con un problema, no porque sea cómodo, sino porque eso significa que ya ha pasado la parte de mayor incertidumbre, en la que desconoces que tienes un hueco por cubrir, en la que gozas de una tranquilidad ingenua porque aún no se ha manifestado algo que dificultará la consecución de tus objetivos en el futuro en más de una ocasión. Y me gusta encontrarlos pronto, porque nunca sé cuan ocupado estaré la próxima vez que surja, no sé si, llegado el momento, podré estar preparado o tener la mente despejada para reflexionar sobre ello con tranquilidad y plantear so...